tag:blogger.com,1999:blog-7878420823469207970.post4002388104788345099..comments2022-08-14T00:56:20.892-07:00Comments on Ópera y otras elucubraciones: En que se desperdician segundas oportunidadesLuis Gutierrezhttp://www.blogger.com/profile/10249273835382888842noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-7878420823469207970.post-26350417176656529292014-07-06T13:08:22.765-07:002014-07-06T13:08:22.765-07:00Estoy totalmente de acuerdo con el autor en que la...Estoy totalmente de acuerdo con el autor en que la puesta en escena de Mario Espinosa es absolutamente fallida y que no hubo ningún cambio a la del año pasado de no ser que los cadáveres o momias que aparecen en la producción disminuyeron reduciendo la cantidad de cinta roja sanguinolenta pues ahora fueron solo cuatro: tres en una de las pesadas e inútiles tarimotas que más estorbaban que servían para el tránsito de cantantes, coro, figurantes, actores, espadachines, bailarruina ( a una sola se redujo la coreografía) y demás participantes enlutados que amontonó el "ponedor" (Luis Gutiérrez dixit) atestando el poco espacio que dejaban las horrorosas tarimas firmadas por Gloria Carrasco como "escenografía". La iluminación fue igual de espantosa que la del año pasado. Siniestra, lóbrega, aburrida, pesada, sobre toda vista desde la luneta. En una de las tres funciones a las que asití, la segunda, quise estar en la galería y desde ese tercer nivel del teatro, se alcanza a ver el piso de las multicitadas tarimotas esperpénticamente feas. Mi amor por esta ópera de Verdi no ha disminuido pero con esa puesta tan horrible creo que muchos no entenderían porque me gusta tanto y les daría la razón. El elenco de cantantes no me disgustó aunque los críticos o uno de ellos siempre citado digan que se necesitan nada más los cuatro mejores cantantes del mundo para los papeles de Manrico, Leonora, Azucena y el Conde de Luna. Algunas grabaciones en LP originales lograron ese ideal cuando menos en tres versiones. Muy bien el trabajo de Enrique Patrón de Rueda que hizo que la orquesta del teatro de Bellas Artes, sobre todo en la segunda función que escuché, se escuchara bastante bien, sin tantas pifias como nos tiene acostumbrados. Ya no asitiré a otra función más, solo me queda la última, hoy domingo, pues aunque tal vez ya hayan mejorado alguna cosa, así suele pasar que la última es la buena pues se entregan totalmente pues no hay que cuidar una próxima función, ya no soportaría volver a ver las tarimotas. Podría soñarlas. Y mis sueños son raros pero no pesadillas.Manuel Yrízarhttps://www.blogger.com/profile/05101904468329971809noreply@blogger.com